Ciudades divergentes

Edición Especial Caminos por las artes

“Lo que habitamos”

Imagen: Norma Maidana

Texto: Italo Calvino

Ciudades divergentes

Dulce, aquí y ahora nos une el violeta transmutador, estás transitando una experiencia diferente, y yo también, me quedé sorprendida, en este plano, mis manos no pudieron retenerte y las tuyas se desdibujaron…quedaron impresas en mi ser, tu mirada, tus palabras, tu integridad, tu generosidad, tu amor apasionado por la Vida. Estás en una ciudad invisible, inaccesible para mí, paralela a ésta Buenos Aires, húmeda de mis lágrimas, que tratan de que mi mente acepte, lo que mi esencia sabe, somos seres espirituales haciendo experiencia humana. El Sur te vio nacer rodeado de la paz del mar, los sonidos de las ballenas te susurraban mi nombre…años después el Viento del Norte me repetían el tuyo, nos íbamos a encontrar… Tantos caminos, ciudades, encrucijadas, dolor y también alegrías, esos caminos nos acercaron…ambos corazones heridos, nos reconocimos, desde arenas lejanas…de antiguas sabidurías…tantos mundos internos y dimensiones coloridas que recorrimos …siempre juntos. Mirada de miel, tomaste mi mano y no dude en tomar la tuya, compañeros risueños decidimos transformar lo cotidiano en una experiencia felizmente extraordinaria, así fueron cada uno de los días…de todos los días…construir nuestra felicidad….hasta que te fuiste y me quedé como una flor sin defensas… en medio de la marea de emociones…perdida…buscándote… Vida, me decías…hoy entre lágrimas me aferro a lo que me enseñaste…hasta qué caminos invisibles nos permitan tomarnos nuevamente de la mano…Y encontrarnos en ciudades divergentes.

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